Tratamientos

Mommy Makeover

¿Qué es la operación Mommy Makeover?

 Una operación de cambio de imagen para mamás es una combinación de procedimientos quirúrgicos diseñados para restaurar el cuerpo de una mujer después del parto. La intervención suele incluir una combinación de procedimientos, como aumento de mamas, lifting, abdominoplastia y liposucción.

El embarazo y el parto pueden provocar cambios importantes en el cuerpo de la mujer, como el estiramiento y debilitamiento de los músculos abdominales, la caída de los senos y el exceso de grasa y piel en varias zonas. El procedimiento de cambio de imagen para mamás pretende abordar estos problemas actuando en varias zonas del cuerpo en una sola intervención quirúrgica.

Los procedimientos específicos incluidos en un mommy makeover dependerán de las necesidades y objetivos de cada persona, así como de las recomendaciones de su cirujano. Es importante tener en cuenta que, aunque un cambio de imagen para mamás puede proporcionar mejoras significativas, no sustituye a los hábitos de vida saludables, como el ejercicio y una dieta equilibrada.

¿Quién puede someterse a una operación de cambio de imagen?

 La idoneidad para una operación de cambio de imagen para mamás se determina caso por caso y depende de varios factores, como el estado de salud general de la paciente, su historial médico y sus objetivos estéticos. Sin embargo, en general, las buenas candidatas para una operación de cambio de imagen son las mujeres sanas que:

1.  Han terminado de tener hijos: La candidata ideal para un mommy makeover debe haber terminado de tener hijos, ya que futuros embarazos pueden deshacer los resultados de la cirugía.

2.  Estén cerca de su peso ideal: Aunque un mommy makeover puede eliminar el exceso de piel y grasa, no es una cirugía para perder peso. Los pacientes deben tener un peso estable y estar cerca de su peso ideal antes de someterse al procedimiento.

3.  Tener expectativas realistas: Las pacientes deben tener expectativas realistas sobre lo que la cirugía puede lograr y entender que no es una solución mágica.

4. Gozar de buena salud general: Los pacientes deben gozar de buena salud física y mental, y no tener ninguna afección médica subyacente que pueda aumentar el riesgo de complicaciones.

5. No son fumadores: Fumar puede aumentar el riesgo de complicaciones durante y después de la cirugía, por lo que los pacientes deben ser no fumadores o estar dispuestos a dejar de fumar durante un cierto período antes y después de la cirugía.

Es importante consultar a un cirujano plástico certificado para determinar si un cambio de imagen para mamás es adecuado para usted y para hablar de los procedimientos específicos que pueden ayudarle a conseguir los resultados deseados.


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